Tienes una mascota y te hace tan feliz, os entendéis tan bien, sois tanto el uno para el otro, que piensas que ha llegado el momento de ampliar la familia y de tener una segunda mascota. ¡Enhorabuena! Sin lugar a dudas, esa es una de las decisiones más generosas y bonitas que puedes tomar, especialmente si el ARISTOPERRO que va a llegar a completar tu hogar es adoptado.

Está claro que el primer paso para tener una segunda mascota es decidir que quieres tenerla. Como pasa con los niños. Pero es natural que surjan dudas. Sobre todo relacionadas con la reacción que tendrá tu perro veterano. El que era el rey de la casa puede no querer compartir su reinado con nadie más, puede tener celos, puede… Puede reaccionar de mil formas. Por eso es mejor estar preparado y tener unas nociones básicas para saber cómo hacer frente a este proceso de integración. Veámoslo paso a paso.

Si es un cachorro:

1. En los primeros días evita demostrar demasiada atención al perro recién llegado, especialmente en presencia de la mascota con más antigüedad; así podrás mantener los celos a raya.
2. Juega con las dos mascotas para favorecer la integración. Eso sí: inicia el juego con la más veterana, para que se siga sintiendo importante.
3. Busca un buen momento para que ambas mascotas se conozcan. Si las dos son cachorros será más fácil, claro, porque instintivamente les apetecerá ponerse a jugar.
4. Si alguna de las mascotas gruñe a la otra o se le eriza el pelaje hay que dejarle muy claro que no se le permitirá pelear.
5. Si tienes una mascota hembra, tendrá más aceptación sobre la otra ya que las hembras son más maternales y la adaptación será mucho más fácil.
6. También es muy importante evitar que la nueva mascota invada espacios sagrados de la otra, como el plato de comida o la cama.
7. Por lo general tienen mucha energía, esta pendiente de que no cargosee en extremo a tu primer mascota ya que esta quizás, no tenga tanta energía como el recién llegado y le puede molestar tanta actividad.

Si es un perro adulto:

Como consejo general, se recomienda tener más cuidado. Piensa que ambos perros tienen ya un carácter definido. Y que el perro veterano tenía asumido su rol de amo y señor de la casa.

1. Para ayudar a que la presentación no sea tan invasiva, intenta que se lleve a cabo en un terreno neutral como pueda ser un parque u otro espacio abierto.
2. Idealmente cuenta con la ayuda de otra persona, para que cada uno sostenga a uno de los perros.
3. Si lo haces en casa, lo mejor, para evitar altercados, es cuidarlos y mantenerlos separados los primeros días. Deja que se olisqueen a través de una puerta.
4. Poco a poco, ve provocando el encuentro y, ante todo, evita que peleen. No permitas que ninguno de los dos intente imponerse sobre el otro.
5. Ten en cuenta que dos ARISTOPERROS adultos pueden pasar por un ritual extenso de postura, oler, tocar e incluso orinar. Después de esto, uno o ambos puede simplemente optar por no prestar atención al otro, pero no te preocupes si gruñe un poco o trata de dominar al “nuevo”. Tienes que intentar que establezcan su relación con la menor interferencia de ti como sea posible.
6. Recuerda que tu primer perro ha establecido hábitos, así que respétalos: tanto en los paseos, las comidas y los juegos tienes que realizarse en las horas habituales. Esto ayudará a tu perro veterano a que no sienta que hay «un antes y un después» en su vida.

Es normal estar un poco preocupado por cómo irá todo con la llegada de un nuevo perro a casa, pero te aseguramos que no es tan difícil como parece. ¡Si hay amor y respeto mutuo es cuestión de días que todo sea perfecto!