El estrés es una de las epidemias del siglo XXI. Nadie se libra de sentirlo. Ya sea de continuo o en ocasiones puntales. Ni siquiera nuestros perros. Como ARISTOPADRES tenemos la obligación moral de estar atentos ante cualquier síntoma que se pueda manifestar y que nos dé a entender que nuestro perro no está pasando por su mejor momento. Pero ¿cómo saber si tu ARISTOPERRO está estresado?
La verdad es que cada perro es un mundo y, por tanto, el estrés se manifiesta en cada uno de una forma distinta. Sin embargo, hay una serie de síntomas que nos pueden ayudar a averiguar si nuestro perro sufre estrés.
Síntomas de enfermedad
Si tu perro experimenta pérdida de apetito, vómitos o diarrea y no tienen una causa obvia, el estrés podría tener algo que ver.
Alteraciones físicas
Si tu perro manifiesta problemas en la piel, un brote alérgico o una caída del pelo excesiva, puede ser que no esté bien anímicamente.
Jadeos sin razón
Los perros, por lo general, jadean para refrescarse cuando hace calor o porque han estado haciendo ejercicio. Si tu perro jadea sin razón aparente, puede que necesite tu ayuda.
Orejas hacia atrás
Los perros tienen diferentes tipos de orejas, pero un indicador de estrés bastante indiscutible consiste en colocar las orejas hacia atrás y hacia abajo. Esta es, probablemente, la señal más fácil de detectar.
Evitación o escape
La cola entre las patas, evitar contacto visual y darte la espalda son señales que indican que un perro se siente incómodo. Con independencia de que esté estresado y haya que tratarlo, lo mejor es respetar este mensaje para evitar malentendidos.
Conductas destructivas
Los perros pueden tratar de aliviar el estrés masticando o mordiendo objetos o personas, incluso mordiéndose a sí mismos. Puede que determinadas circunstancias acentúen esta conducta (dejarlo solo, exponerlo a otros animales…). Trata de evitarlas.
Ladridos o aullidos excesivos
Si tu perro no es particularmente ladrador y, de pronto, empieza a ladrar sin ton ni son, dentro o fuera de casa, puede ser un signo claro de ansiedad. Nuestro consejo: trata de encontrar un patrón (cuando lo dejas solo, cuando hay extraños, cuando llaman a la puerta…) para determinar la causa de la ansiedad e intentar ayudarlo.
Una vez diagnosticado, ¿cómo podemos ayudar a tu ARISTOPERRO a superar el estrés? Lo principal es visitar el veterinario, claro, pero tú también puedes llevar a cabo una serie de gestos y acciones que seguro que ayudarán a tu perro a estar mejor, a animarse y a volver a ser él mismo poco a poco.
1. Ten paciencia. Parece una obviedad, pero no lo es. El estrés es un problema que puede agudizarse y derivar en dolencias más serias, como la depresión. Del mismo modo que a los humanos no se nos va de un minuto para otro, a tu perro tampoco. Es cuestión de tiempo y de paciencia, mucha paciencia.
2. Evita las situaciones estresantes. Si ya has detectado ciertos patrones de estrés, evítalos en la medida de los posible. Si, por ejemplo, le estresa la gente, evita aglomeraciones, sal a pasear a horas en las que la calle no esté tan transitada, etc.
3. Haz ejercicio con tu perro. Al igual que nos sucede a las personas, el ejercicio también es beneficioso en cuerpo y alma para los perros. Se relajará, se divertirá y mantendrá su mente ocupada.
4. Mima a tu perro, acarícialo y pasa más tiempo con él. En este post te descubrimos las mejores actividades para llevar a cabo con él. Porque por encima de todo, tu perro es feliz cuando está contigo. Ten un gesto con él, sorpréndele con un juguete nuevo que favorezca su agilidad mental y su equilibrio, como los que te mostramos aquí.
Esperamos que estas pautas te haya sido de utilidad y que, en caso de que tu ARISTOPERRO sufra estrés, se recupere lo antes posible. Recuerda siempre consultar a tu veterinario ante cualquier cambio significativo que descubras. El veterinario es el experto y siempre tendrá un buen consejo para darte.