Los dueños se preocupan por que sus mascotas estén sanas y felices en casa, que tengan la vida como se merecen. A veces, notas un comportamiento diferente en tu gato o tu perro y no sabes lo que le pasa.
Ante comportamientos extraños siempre conviene acercarse al veterinario para que le examine y te pueda decir con exactitud que podría pasarle a tu mascota. Incluso, tener conocimientos sobre posibles síntomas de enfermedades te ayuda a tranquilizarte y no preocuparse tanto por tu mascota.
Los gatos cuando no están castrados, tienden a escaparse de casa en busca de pareja. Muchas gatas se marchan de casa durante unos días y luego vuelven embarazadas. De este modo, se aconseja siempre castrar a tu felino para evitar problemas de salud y embarazos. La esterilización debe “ser en una edad determinada, cuando la gata ya se haya desarrollado”, aconseja María Martínez colegiada veterinaria especialista en medicina de comportamiento de la Clínica Malasaña.
En el caso de que tu gata se haya ido de casa, puede que no percibas síntomas raros ni ningún cambio en su cuerpo, pero si tu felina no está castrada, es probable que al escaparse se haya quedado embarazada.
¿Qué síntomas te indican que tu gata está embarazada?
Desde ARISTOPET hemos hablado con María Martínez, colegiada veterinaria especialista en medicina de comportamiento de la Clínica Malasaña para que nos explique cuál podrían ser los principales síntomas que te ayuden a detectar que tu gata está embarazada.
En primer lugar, hay que saber que el tiempo de gestación durará alrededor de 9 a 10 semanas. Por tanto, varía mucho del período en el que este.
Algunos de los posibles síntomas que te pueden ayudar a saber si tu gata está embarazada son:
- Aumento de peso: si notas a tu gata muy pesada y que está comiendo mucho hay que tener cuidado. “Una posible equivocación es pensar que está engordando porque come mucho, pero en muchos casos si ha tenido el celo hace poco y no está castrada puede que sea porque este embarazada”detalla María.
- Vientre abultado: se podría empezar a notar a partir de la cuarta semana.
- Hinchazón en las mamas y pezones más rosado: Suele ser el síntoma mas habitual y el que los dueños suelen darse cuenta.
- Nauseas: podría tener vómitos.
Respecto a cambios de comportamientos, nos ha destacado que el embarazo no afecta por igual a todas las gatas, pero que algunos cambios de comportamientos podrían ser:
- Perdida de apetito: En muchos casos, los cambios hormonales hacen en las mujeres que pierdan las ganas de comer y se noten más cansadas.
- Mas cariñosa: puede que tu gata este más mimosa. Le sucede lo mismo que cuando esta con el celo. Hay algunas que tienden a ser más mimosas y otras a estar mas irascibles y ariscas.
- Mas dormilona: uno de los efectos puede ser que tu gata este mas cansada y pase más tiempo durmiendo.
Estos son algunos de los posibles síntomas que puede tener una gata cuando está embarazada. Cómo hemos mencionado anteriormente, no todas tienen los mismos comportamientos, siempre hay excepciones.
En caso de que veas uno de estos síntomas acude a tu veterinario de confianza para que te diga con exactitud que le puede pasar, porque puede que no este embaraza, sino le sucede otra cosa. Esperamos que estos consejos os ayuden a tener más información sobre los felinos y a saber actuar en caso de percibir algún síntoma.
María Martínez, colegiada veterinaria especialista en medicina de comportamiento de Madrid
Clínica Veterinaria Malasaña
Madrid 28004