En Japón es muy frecuente encontrarnos varios neko cafés por las calles, o lo que es lo mismo cafés de gatos. Esta moda surgió en Japón debido a la prohibición de tener mascotas en la mayoría de hogares y conjuntos residenciales japoneses. La idea principal de estos locales es poder jugar y acariciar a estos felinos. Al entrar lo clientes pagan su estancia por horas. El lugar perfecto para los amantes de los gatos, que donde poder relajarte y desconectar del bullicio de la ciudad.
Imagen: Polineko
En España también ha llegado esta moda. En 2013 se abrió el primer café para gatos en Madrid, La Gatoteca, situado en el barrio de Lavapiés. Una asociación sin ánimo de lucro que busca ayudar a los gatos sin hogar a encontrar una nueva familia. Además, cuentan con una gran variedad de actividades educativas, terapéuticas y lúdicas del mundo gatuno.
El amor por estos felinos ha ido creciendo, y el pasado mes de octubre se abrió otro neko café, en este caso en el barrio de La Latina, Polineko. Mientras te tomas un café o té acompañado de unos aperitivos japoneses pues disfrutar de un rato agradable jugando y acariciando a los gatos del local. El objetivo principal de este bar es fomentar la adopción de gatos de todas las edades. Además, podrás encontrar libros, cómics y juegos de mesa, y productos anime muy característicos de la cultura japonesa. En Polineko se paga en función del tiempo que vayas a estar y siempre se invita a una consumición.
Imagen: Polineko
Pero no solo encontramos este tipo de establecimientos en Madrid, en Valencia también inauguraron un neko bar el pasado año, El Passatge del Gats. Situado en la C/ Turia Nº 28, es el primer Cat Café de la ciudad. Junto con la Protectora ADAANA, buscan mejorar la situación de los gatos abandonados de la ciudad. El Passatge Dels Gats colabora ofreciendo cobijo, atención y cariño a los gatos rescatados hasta que encuentren un nuevo hogar. Al igual que en el resto de neko cafés, pagas una entrada en función del tiempo que quieras estar en el local.
Imagen: El Passatge del Gats
Aunque en estos locales los ARISTOGATOS reciben los cuidados y la protección necesaria, estos bares solo deberían ser un lugar de tránsito hasta que encuentren un nuevo hogar donde recibir el cariño y la atención que se merecen.